Intervenimos en todo tipo de conflicto privado y en el que se haya roto o interrumpido la comunicación personal entre las partes.
En concreto, nuestra actuación se dirige a prevenir o minimizar los conflictos, a evitar la apertura de procedimientos judiciales de índole contenciosa, poner fin a los ya iniciados o reducir sus consecuencias negativas, así como a facilitar a las partes el cumplimiento de sentencias judiciales que afecten a sus relaciones personales o profesionales.
A título de ejemplo, mediamos en los siguientes ámbitos:
Los conflictos familiares, entendiendo como tales los señalados a continuación:
Los conflictos surgidos en el ámbito de las organizaciones.
Los conflictos vecinales y los generados en el ámbito de la propiedad horizontal y de la organización de la vida ordinaria de las urbanizaciones.
Los conflictos sanitarios de cualquier índole.
Cualquier otro conflicto de carácter privado, tanto civil como mercantil, en que las partes deban mantener relaciones personales en el futuro, si, razonablemente, aún puede evitarse la iniciación de un litigio ante los juzgados o puede favorecerse la transacción.